Peñoncillo a Marbella (Línea FC)

La primera citación minera registrada en Marbella, reflejada en la Gaceta de Madrid del 7 de julio de 1925, en la que se manifiesta la existencia de las minas de grafito o lápiz-plomo de Marbella. El Estado nombró inspector de dichas minas a Enrique Dchenellbuhel (Gaceta de Madrid, 27.05.1834), quien hace cesión al Estado, de las mismas. A su vez, el Estado decidió venderlas, presentando en las Cortes un proyecto de Ley para la “Enajenación de las minas de grafito y lápiz-plomo de Marbella”, entre otras, publicando el 31 de enero de 1851, donde se detallan las bases de adquisición, dictadas por el Ministerio de Hacienda (Gaceta de Madrid, 02.02.1851).

No obstante la principal riqueza de Marbella en aquel tiempo, mitades del siglo XIX, la constituía la fundición de metales en sus ferrerías, entre ellas la Ferrería del Angel y la de La Concepción, aprovechando la cercanía de las minas de magnetita de Ojen, en especial la minas La Choza, San Juan Bautista y San Nicolás, cuyo mineral llegaba a las ferrerías a través de un cable desde las minas del Peñoncillo, muy apreciadas por su bajo contenido en fósforo. Se llegó, el 29 de octubre de 1868, a un acuerdo de venta de la ferrería del Angel con todas sus pertenencias mineras a los hermanos William y Samuel Snythe Malcolm, quienes la tomaron acogidos a la Ley de Bases de minas del año 1868, revendiendo la Ferrería y sus instalaciones, y reteniendo las minas, que era lo productivo, que centraba todo su interés.

El 29 de octubre de 1868, formalizaron notarialmente la compraventa, representando a los vendedores los Sres. Juan Giró y Aramburu, acompañados por Jorge Grandy y Alcarraceda, como presidente de la Junta Liquidadora de la compañía.

Los hermanos William y Samuel Snythe Malcolm, solicitaron el 18 de abril de 1869, al Ayuntamiento de Marbella, la cesión de los terrenos del común, para establecer el ferrocarril y parte de la explanada junto al embarcadero metálico que tenían previsto construir desde Sierra Blanca.

No obstante en el contrato previo se obligaban a establecer un ferrocarril hasta un muelle embarcadero para la salida del mineral, fundamentalmente dedicado a la exportación. En 1870, William S. Malcolm solicitó a la administración la construcción del muelle embarcadero en la Playa de Marbella. Se le concede por la R.O. de 15 de febrero de 1870 (Gaceta de Madrid, 21.02.1870), previo ingreso en la caja general de depósitos de la garantía de 5.000 pts, debiendo ejecutar su construcción en el plazo de dos años, ajustada al proyecto presentado en su solicitud. Este ferrocarril era conocido como Ferrocarril Minero de San Juan Bautista.

La Revista de Obras Públicas nº 11 del año 1872, detalla ampliamente las características del embarcadero, por lo allí manifestado sabemos que lo concedió S.A. el Regente del Reino y su muelle constaba de tres partes, una primera de terraplen de 38 ml x 3,60 ml, una segunda que se adentraba en el mar sobre pilotes arriostrados con vigas en cruz de San Andrés de 62,60 ml x v5,50 ml en 9 tramos, y una tercera parte de 78 ml x 14 ml apoyado en 15 soportes. El conjunto en su cabecera permitía recibir buques con un puntal de más de seis metros. Las obras terminaron en abril de 1872.

Las minas, situadas en Ojen, producían Magnetita. Conocidas como minas del Peñoncillo, iniciaron sus trabajos el 8 de diciembre de 1871, a la vez que se procedía a la creación de la empresa por los hermanos William y Samuel Snythe Malcolm, como promotores de la sociedad “The Marbella Iron Ore Cº Ltd” también conocida por “Compañía de Mineral de Hierro de Marbella” constituida el 11 de julio de 1872 en Londres, en la notaria de Wlliam Webb Venn. En aquel acto se manifestaron los estatutos de la sociedad, reflejados en la Gaceta de Madrid del 4 de junio de 1873. Entre las manifestaciones del acto de constitución se daba como objeto de la misma, entre otros la adquisición de las minas de piedra ferruginosa y mineral de hierro, propiedad de los hermanos William y Samuel Snythe Malcolm en Marbella. Así como su explotación y la adquisición del ferrocarril, el material fijo y móvil, vagones, talleres, almacenes y depósito, Y el arrendamiento de minas, hornos y fundiciones. William y Samuel Snythe Malcolm transfirieron a la nueva sociedad todos sus derechos sobre las minas y el embarcadero, el 5 de agosto de 1872, recibiendo a cambio acciones liberadas de la sociedad.

La empresa se constituyó como sociedad de responsabilidad limitada, con un capital de 300.000 £ en 30.000 acciones de 10 £, los accionistas presentes en la constitución fueron:

George Anderson Henry Bastable
William Malcolm John Parry Sanders
Samuel Snythe Malcolm David Bordwn Garham
Edivin Norton

En el mismo acto se nombró abogado de la compañía a Carlos Gydweyn Ellison y directores a los Sres:

George Anderson John Cockburn
Thomas Clavering William Malcom
Carlos D.W. Cammell Samuel Snythe Malcolm
Joseph Dodds John Foicey

De todos ellos William Malcom y Samuel Snythe Malcolm fueron nombrados directores, por cinco años con un sueldo de 500 £. El documento de constitución de la sociedad fue intervenido para su legalización en España por el Cónsul General Urbano Montejo.

La compañía explotó el conjunto de minas del Peñoncillo, llegando en 1891 a exportar 96.529 Tm de mineral. A través de una línea de 6 Kms y ancho métrico, con tracción vapor, cuyo proyecto se redactó en 1869, en un itinerario que partía del Arroyo del Peñoncillo en Ojen, recibiendo mineral de las minas de San Juan Bautista y La Concepción. Rindiendo su itinerario en Marbella, junto a la carretera de Estepona, donde se estableció un apartadero y un depósito de mineral, con bascula, para formar trenes hasta el embarcadero. Estos terrenos y los de la línea en casi su totalidad eran terrenos públicos cedidos por el Ayuntamiento de Marbella, salvo algunas parcelas que se tuvieron que adquirir. Por los terrenos del apartadero se pagaron 1.021,87 pesetas.

En 1899 se elevó instancia a la Administración, en nombre de “The Marbella Iron Ore Cº Ltd., representada por Francisco Belon Salgado, solicitando la habilitación de la aduana de Marbella como Aduana de 2ª clase, para la importación de maquinaria, material fijo y móvil para el ferrocarril, y material para la reparación del muelle. La Administración, por R.O. de 17 de febrero de 1899 (Gaceta de Madrid, 28.02.1899), no accedió a lo solicitado, pero si que amplió la habilitación de la Aduana.

Desconocemos la trayectoria empresarial de la “The Marbella Iron Ore, Cº Ltd”, puesto que no publicaba en la Gaceta, tal como era preceptivo sus balances. Únicamente conocemos una convocatoria cursada para el 24 de marzo de 1911, por la que el Consejo de Administración de la compañía, manifestaba que de conformidad con el articulo 8 º de los estatutos, se trataría de tomar medidas económicas pertinentes y en su caso de, vender, ceder, traspasar, fusionar o liquidar los derechos y propiedades. Evidentemente su situación financiera no sería de lo más boyante.

La crisis industrial de finales del siglo XIX afectó gravemente a la explotación minera, especialmente en 1893, donde finalmente ante la escasa inversión en sistemas de extracción se perdió competitividad.

Igualmente desconocemos cuando dejó de operar el ferrocarril, y el destino de su material móvil, puesto que en nuestras indagaciones no hemos encontrado expediente de caducidad alguno.

En 1946, se declaró de interés militar la mina de grafito “Marbella” (BOE 11.01.1946).

Material Móvil;

Locomotoras

Nº Nombre rodaje Fabricante Nº Fab Año de fab. Reff,

1 Dick & Stevenson 34 1870 (1)
2 Dick & Stevenson 32 1870 (1)
3 Dick Stevenson 52 1872 (2)
4 Hudswell Clarke Cº Leeds 283 (3)
5 The Marbella Iron Ore Cº Ltd 5 (3) (4)

(1) 39,5 CV
(2) 32 Cv
(3) 5,68
(4) Montada con caldera Hudswell Clarke

Al parecer las dos últimas locomotoras eran iguales, desconocemos si el tren de rodaje de la nº 5 era original del mismo fabricante que la caldera, en la memoria de la compañía consultada, indica que se fabricó en los talleres de la misma.

El sistema de utilización obedecía al empleo en el tráfico entre de la explanada de acopio del material y el embarcadero servido por las dos locomotoras mas pequeñas. las nº 4 y nº 5. En tanto que las tres primeras, de mayor porte, operaban en las ramas de material entre Ojen y la explanada del embarcadero.

Vagones:

La memoria del la compañía en 1872 refleja el siguiente parque de Vagones:

10 vagones de dos ejes adquiridos en 1870, otros 10 en 1871 y 175 unidades adquiridas en 1872, estos últimos valorados en 57.963 Pts lo que arroja un coste por vagón de 331,20 pesetas.

Se recibieron de Inglaterra vagonetas de mina de dos ejes recibidas en:

año Nº de vagonetas

1870 19
1871 10
1872 179 vagones valorados en 57.965 pts

Fuente: investigación propia y José Bernal Gutiérrez- iV congreso de Historia Ferroviaria-Málaga.

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Añadido:  Miércoles, 02 Septbre., 2009
Autor:  Juan Peris Torner
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