Castro a Allen (Línea FC)

Compañía fundada el 20 de Septiembre de 1890, estableció una línea de 12,77 Km de vía métrica y un ramal de 6,1 Km de vía de 750 mm. con un costo de 600.000 Pts desembolsando un capital de 1.000.000 Pts.

Esta línea obedecía a una concesión del 3 de julio de 1891, firme a partir del 17 de febrero de 1892, a Luis Ocharán Mazas empresario minero que poseía minas en Allen, quien tuvo la iniciativa de solicitar, el 10 de julio de 1890, un ferrocarril, desde el monte y minas de Allen en el término municipal de Sopuerta y Arcentales en Vizcaya hasta los muelles embarcaderos en la ensenada de Castro Urdiales en Santander, sin subvención y con la declaración de utilidad pública a efectos de las expropiaciones (Gaceta de Madrid, 04.07.1891). A dicha solicitud acompañó la de construcción a su costa de un muelle prolongación del existente, con un presupuesto de 160.000 pesetas. Siendo el promotor del Ferrocarril de las minas del Monte Allen a Castro, concedido el 3 de julio de 1891, quedando pendiente la redacción de un proyecto presentado y aprobado por la R.O. de 15 de diciembre de 1891, quedando pendiente de concederlo definitivamente el 17 de febrero de 1892, como ferrocarril económico de vía estrecha de 750 mm de ancho, sin subvención del Estado, con un itinerario que cubría 18.710,25 ml, incluyendo los cargaderos de Castro Urdiales y San Guillen.

El ferrocarril se ajustó al proyecto aprobado por R.O. del 15 de diciembre de 1891 y sobre el pliego de las condiciones particulares de la concesión aprobadas el 14 de enero de 1890, aceptado por el peticionario el 8 de enero de 1890. Debiendo depositar una fianza de 36.104 pesetas que es el 3% del valor del presupuesto de las obras que ascendía a 1.203.466 pesetas (Gaceta de Madrid, 12.03.1892).

Respecto de los embarcaderos, el propio concesionario Luis Ocharán Mazas, de los ochos muelles de la ensenada de Castro Urdiales por R.O. de 14 de marzo de 1891, solicitó dar comienzo a las obras, en el momento en que se dé publicidad en la Gaceta de Madrid, la concesión del ferrocarril minero de Monte y Minas de Allen a dichos muelles para el embarque de mineral. Solicitud que fue atendida por la Administración el 31 de agosto de 1891 (Gaceta de Madrid, 22.09.1891).

La compañía ejecutora de la obra, mantenía como técnico al ayudante de Obras Públicas Anastasio Grijalba, a cuyo cargo estaba el desarrollo del proyecto detalló tres fases de la obra, la primera planteada el 17 de marzo de 1892 al Ayuntamiento de Castro-Urdiales para atravesar el casco urbano hasta el cargadero de San Guillén:

a) Tramo de Castro a Callejamala de 12.770 ml y 196,10 ml de desnivel
b) Tramo del Túnel del Campochico a Allen de 5.113 ml y 75,20 ml de desnivel
c) Tramo de enlace entre a) y b) mediante el plano inclinado de Otañez de 926,63 ml y 281 ml de desnivel.

Del muelle del embarcadero de San Guillen atravesando la población se accedía a un viaducto de 322 ml hasta la bahía de Urdiales mediante un tramo del que seria fuituro ferrocarril de Castro a Traslaviña, alcanzando Santa Catalina donde se encontraba la estación principal, los talleres, deposito de locomotoras, y la playa de maniobras desde la que se accedía al depósito de mineral del Torvejón, capaz para 25.000 Tm, alcanzando Castro Urdiales a 3.011,52 ml de San Guillen.

Luis Ocharán Mazas solicitó se aprobara la transferencia del ferrocarril, en su calidad de concesionario a la “Compañía del Ferrocarril minero de Castro a Allen”, siendo concedida según se refleja en la Gaceta de Madrid del 26 de abril de 1894.

Inaugurada el 12 de mayo de 1895 y abierta al tráfico el 7-5-1896 siendo cerrada el 1-7-1936, entre el embarcadero de Castro Urdiales en vía métrica, hasta el plano inclinado, desde este plano inclinado a las minas de Allen, se completaban los 18,81 Km totales de trazado, de los que en esta segunda sección a lo largo de 12.770 ml se estableció mediante un ancho de 750 mm.

Se sustituyó en 1927, el viaducto de madera de Dombergón por otro de sólida construcción. El embarcadero (ROP 1300, año 1900) daba salida a la zona minera de Sopuerta, mediante una instalación de 64 ml de los que 36 ml volaban 7 ml de altura sobre el nivel del mar.

Tuvo una buena rentabilidad y explotación entre 1915 y 1918, descendiendo los tráficos paulatinamente hasta 1920. En la memoria de 1928 se citaba la explotación de las siguientes minas de la compañía: Mina Amalia Juliana 20.237 Tm, Mina Federico 12.414 Tm y Mina Ntra. Sra. de Begoña 1.232 Tm, a las que hay que añadir la venta de 523 Tm de tierra refractaria, arrojan un total de 34.406 Tm.

Año Movimiento de vagones Movimiento en el cargadero de vapores

1927 8323 31.182 Tm
1928 9000 34.406 Tm.

La explotación minera fue cerrada en 1960.

La O.M. de 22 de mayo de 1947 (BOE, 03.06.1947) declaró caducada la concesión, sustituyendo el servicio público de Castro a Allen por el de Castro Urdiales a Traslaviña explotado por el Estado. A la empresa se le denegó la venta de su material de tracción.

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Añadido:  Miércoles, 26 Agosto, 2009
Autor:  Juan Peris Torner
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