Circula hace bastante tiempo y no me decidí a ponerlo antes ...

aquí esta:



Yo no entiendo de barcos, sino de trenes.

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Y para macabro... este:

La persona accidentada ha sido llevada a un lugar seguro. Arrancaremos en breves momentos

Una primera experiencia con un suicida en un tren de Tokio...

Y como después de 20 minutos de búsqueda de “los empleados de la compañía (…) armados con una linterna y una bolsa de plástico”, el conductor anuncio “en un ejercicio ejemplar que quedará para los anales de la Historia del Eufemismo”: “La persona accidentada ha sido llevada a un lugar seguro. Arrancaremos en breves momentos”.

Recuerda a una historia donde un suicida salto a la vía justo cuando iba a pasar el tren, pero este freno y no lo llego a seccionar del todo.

Esto lo contaba un guardia urbano recién salido de la academia y no sabia muy bien que hacer. El hombre estaba muerto pero su cuerpo seguía entre las ruedas del tren y no se podía sacar.

Al final hizo presencia el jefe de estación y ordeno sin ninguna vacilación que el tren arrancara y siguiera su trayecto y le dijo sin inmutarse al joven urbano: “Los trenes no echan nunca marcha atrás, cuando pase recogeremos los trozos”

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Ya que estamos en plan macabro, ahí va una anécdota que me contaron como cierta.

-Hace ya bastantes años cuando todavía había Jefes de Tren, a un suicida típico le dió por poner el cuello en el carril al paso de un expreso, con el resultado que cabe imaginar...

El cuerpo decapitado fué desplazado a un lado de la vía, pero ¿y la cabeza?,... la cabeza no aparecía por ninguna parte.

Resignados a su mala suerte, varios ferroviarios se dedicaban a buscarla por los bajos de la locomotora y el tren y la caja de la vía, cuando por el otro lado aparece el jefe de tren comiendose el "bocata" tranquilamente con una mano, mientras que sacando con la otra que llevaba a la espalda la cabeza cogida por los pelos, preguntó tranquilamente ...¿a que estaís buscando esto?.

Me parece una historia un poco "heavy", pero a mí me la contaron cómo cierta...¡qué cuajo tenía el colega!.